Suiza es un país situado en el interior de Europa, rodeado por numerosos países entre los que se encuentran Alemania, Francia, Italia, Austria y Liechtenstein.
Gracias a su situación geográfica, siempre ha sido un país muy plural, en el que se hablan varios idiomas y que históricamente ha sido un país de acogida de inmigrantes.
Actualmente, Suiza figura como uno de los países más caros de Europa, algo que deberás tener en cuenta a la hora de viajar. Pero, sin duda, merecerá la pena su visita porque también es considerado uno de los países más bonitos del mundo.
PERNOCTAR EN SUIZA CON AUTOCARAVANA
Por su contra, debemos decir que en Suiza, pese a ser un país con tradición en el caravaning, la pernocta libre está prohibida y hay pocas áreas para pernoctar, aunque sí existen y están bien señalizadas.
Pero, por otra parte, el país sí cuenta con una excelente red de campings por todo el país, a un precio relativamente económico (entre 20 y 40 euros la noche, algunos incluso más baratos) si tenemos en cuenta que Suiza es un país caro.
La página oficial de turismo de Suiza ofrece un mapa con distintos campings a lo largo del país, en los que podrás pernoctar y disponer de numerosos servicios para tu autocaravana.
CIRCULAR CON AUTOCARAVANA EN SUIZA
Pese a que la ruta que os presentaremos intenta evitar las autopistas para dar una experiencia más auténtica, Suiza utiliza el sistema de la viñeta para ellas, por el cuál en lugar de pagar cada vez que pases por una autopista podrás circular por cualquier carretera de pago del país.
Si deseas evitar carreteras secundarias y conducir por autopista, podrás adquirir la viñeta online y también en cualquier gasolinera o área de descanso por unos 39 euros.
Las carreteras suizas son muy seguras, debido a su excelente conservación y amplitud, por lo que podrás conducir tu autocaravana con total tranquilidad por ellas.
Por otra parte, deberás de tener mucho cuidado con las normas viales. Las multas por exceso de velocidad, por ejemplo, son elevadas, por no hablar de superar el 0,05% de alcohol en sangre o usar el móvil al volante.
Los límites de velocidad son de 120 km/h en autopistas, 80 km/h en el resto de carreteras, y de 50 km/h en ciudad. También debes llevar las luces puestas en todo momento, incluso de día.
LA GRAN RUTA DE SUIZA
Y la mejor forma de viajar por Suiza en autocaravana será siguiendo la Gran Ruta de Suiza, siempre que dispongas de, como mínimo, 10 días para hacer la visita. Si son más de 10 y puedes ir con mayor tranquilidad para hacer el viaje lo más completo posible, ¡mejor!
Se trata de un trayecto de unos 1.600 kilómetros, que rodean a este país alpino y en los que recorrerás numerosos puntos clave, que van desde pueblos de ensueño, hasta hermosos lagos, prados alpinos inimaginables pero también ciudades llenas de arte y cultura.
Por si fuera poco, también cuenta con ofertas gastronómicas, culturales y de actividades al aire libre de lo más atractivas, las cuáles podrás ir descubriendo a lo largo de los tramos de la ruta.
8 etapas en las que visitarás hasta 46 lugares destacados, 22 lagos, 5 puertos de montaña alpinos e incluso 13 Patrimonios de la Humanidad por la UNESCO. La ruta también cuenta con hasta 650 señales que indican la ruta a seguir, aunque siempre podrás usar tu GPS, por supuesto.
Además, viajarás a las 13 regiones turísticas y las 4 áreas lingüísticas del país. Aclarar que, a mayores de los puntos principales que mencionaremos, en las cercanías de la ruta existen lugares de interés muy próximos.
Las fechas ideales para realizar la ruta son entre abril y septiembre puesto que serán los meses más cálidos y en los cuáles la belleza de sus paisajes se multiplicará por tres, además de ser más seguro viajar. En cambio, si eres fan de los deportes de invierno o te gustan las estampas invernales, deberías plantearte visitar Suiza en invierno.
Teniendo en cuenta que probablemente te dirijas desde España, lo ideal será comenzar la ruta por Ginebra, puesto que es el punto principal más al sur de Suiza y cercano a España.
Antes de comenzar, cabe decir que existen multitud de variantes a estas etapas recomendadas por la página oficial de turismo de Suiza. Así que toma esto como una recomendación y siéntete libre de organizar la ruta a tu gusto y disfrutar como más te apetezca.
Sin más dilación, a continuación os presentamos las 8 etapas de esta Gran Ruta de Suiza, ¡allá vamos!
Ginebra – Neuchâtel (218 km)
En cuanto a la etapa inicial, comenzarás desde la archiconocida ciudad de Ginebra, una de las más cosmopolitas de Europa, además de ser uno de los orígenes del arte relojero de Suiza.
Desde allí podrás partir hacia distintos puntos claves de esta etapa, como por ejemplo la zona de Ouchy y su relajante paseo junto al lago Léman, o bien el Parc naturel régional Jura vaudois, un lugar montañoso y boscoso ideal para los amantes del senderismo.
Además, en la frontera entre Neuchâtel y Vaud existe un valle muy singular, Creux du Van, que cuenta con acantilados de imponentes dimensiones y que ofrece unas vistas espectaculares.
La primera parada obligatoria en Neuchâtel será el lago Neuenburgersee, el lago más grande situado en Suiza. En él encontrarás la zona pantanosa más grande de Suiza, gran oferta de deportes acuáticos y unas orillas con hermosos pueblos.
Y, ya en la ciudad de Neuchâtel, recomendamos pasear por su casco medieval, visitar sus museos y teatros así como su castillo e iglesia de estilo gótico del siglo XII.
Otras posibles paradas:
- Dardagny
- Nyon
- Carouge
Neuchâtel – Berna (250 kilómetros)
En la segunda etapa de este viaje, tras dejar Neuchâtel atrás, el primer destino será la ciudad medieval amurallada de Murten, situada a orillas del lago homónimo. Podrás pasear por las pintorescas calles de su casco antiguo y de un montón de actividades culturales.
La siguiente parada será Friburgo, una de las ciudades más grandes de la Edad Media que se encuentra bañada por el río Saane. De nuevo nos encontramos con una belleza medieval, gracias a sus más de 200 fachadas góticas, restos de muralla y una catedral que resulta ser el principal atractivo de la ciudad.
Desde ella, podrás ver sus espectaculares vidrieras y una gran vista panorámica desde su torre de 74 metros de altura. A mayores, recomendamos que visites las 11 fuentes históricas, de diferentes siglos, que tiene Friburgo.
Una vez completes esta parada, tu siguiente objetivo será Gruyères, donde te sumergirás en la Edad Media y será imprescindible visitar su castillo fortificado del siglo XIII. Recomendamos realizar la visita por dentro para una mejor experiencia y para disfrutar de unas vistas impresionantes del paisaje prealpino.
En cuanto a la gastronomía, aquí también podrás probar especialidades de los prealpes pre burgueses, como la fondue o los chocolates de la fábrica Maison Cailler.
Gstaad es la próxima parada, una región vacacional muy conocida por su oferta de esquí y por ser lugar de visita de famosos. Pero ofrece mucho más, ya que las aldeas de sus cercanías ofrecen una oferta interesante para familias con niños.
Aconsejamos la visita a la reserva natural del lago Lauenensee y sus cataratas, para disfrutar de la tranquilidad de la naturaleza suiza más pura.
Posteriormente, en Jungfraujoch, podrás subir a la estación de tren más alta de Europa y disfrutar de unas vistas glaciares y alpinas inigualables. En la ruta del valle de Lauterbrunnen podrás visitar espectaculares cataratas, como las de Staubbachfall, Trümmelbachfälle y Mürrenbachfall, dejándote cautivar por su fuerza y sonido.
Un lugar que impresionará tanto a niños como a mayores serán las cuevas de San Beato en Sundlauenen, que cuentan con un camino de alrededor de 1 kilómetro, lleno de estalactitas y estalagmitas y de fácil acceso.
Para finalizar esta etapa, llegarás a Berna, la capital suiza. La ciudad se encuentra entre los Patrimonios Culturales Mundiales de la UNESCO, gracias al perfecto acoplamiento entre su aspecto medieval y urbano.
Además, sus vistas al paisaje alpino, sus singulares tejados, fachadas de piedra y fuentes con figuras renacentistas hacen de la capital uno de los mayores testimonios medievales en Europa.
Otras posibles paradas:
- Saint Petersinsel
- Garganta de Jaunbach
- Lessoc
- Niesen
- Thun
Berna – Zürich (315 kilómetros)
¡Tercera etapa! Esta vez la primera parada recomendada será el bello castillo de Hallwyl, construído en el siglo XII y rodeado por agua. Podrás recorrer el interior y conocer cómo era la residencia y vida de la familia von Hallwyl.
Más tarde llegarás a la ciudad de Lucerna, que destaca por el puente medieval Kapellbrücke, uno de los puentes con techo de madera más antiguos de Europa. A mayores, debes visitar la muralla Museggmauer y las plazas e iglesias de la ciudad.
Muy cerca de Lucerna se encuentra el lago y el monte Pilatus, uno de los lugares más místicos de Suiza. Podrás acceder a este macizo desde Lucerna a través de un funicular o teleférico, o también mediante un tren cremallera desde Alpnachstad. Para los más valientes y deportistas, también existen caminos para subir a pie.
La última parada de este tramo será Zürich, el corazón financiero y cultural de Suiza. Rodeada por los Alpes y bañada por el río Limago, el cuál deriva en el lago Zürisee, la ciudad ofrece desde una excelente gastronomía y tiendas de lujo hasta interesantes museos o vida nocturna. Pero, todo ello, sin perder la naturalidad.
Otras posibles paradas:
- Biosfera de la UNESCO en Entlebuch
- Capilla de Tell
- Rigi
- Monasterio de Einsiedeln
- Soleura
Zürich – Appenzell (175 kilómetros)
Esta etapa te llevará desde el ya mencionado centro financiero y cultural de Suiza, Zürich, hasta una región rural como es Appenzell.
Uno de los lugares más recomendados de la etapa y que estamos seguros de que te impresionará son las cataratas del Rin, en Schaffhausen, la frontera con Alemania. Se trata del salto de agua más grande de Europa, con una anchura de 150 metros.
A través de un viaje en barco, podrás navegar por las inmediaciones del salto e incluso acceder a una gran roca que resiste a la erosión del agua en medio de las cataratas.
Y, por supuesto, deberás visitar el casco antiguo de Schaffhausen, considerado uno de los más llamativos de Suiza, por sus casas burguesas, la iglesia gótica de San Juan y la fortaleza Munot.
Tampoco deberás dejar de visitar el lago Constanza, el tercero más grande de Europa y el cuál se encuentra rodeado por tres países: Suiza, Alemania y Austria. Curioso, ¿verdad? Aquí disfrutarás de agradables paisajes de viñedos, castillos y jardines.
La última estación de este tramo es Appenzell, una pequeña región suiza en la que encontrarás la parte más rural del país: desde costumbres del campo y la festividad del descenso de animales al valle, hasta música y bailes tradicionales.
Otras posibles paradas:
- Iglesia Grossmünster
- Stein am Rhein
- Saint-Gall
- Hallau
- Ermatingen
Appenzell – St. Moritz (200 kilómetros)
El primer descubrimiento que harás en esta etapa será la falla tectónica suiza de Sardona, declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad. Allí te encontrarás con uno de los mejores testimonios de las placas tectónicas: el cabalgamiento de Glaris.
La siguiente parada es Maienfeld, una pequeña comuna suiza que sirvió de inspiración a la escritora del cuento infantil Heidi hace ya casi 150 años. ¡Seguro que los más fans del cuento y de la serie disfrutaréis y os sentiréis como la mismísima Heidi en este idílico paisaje!
En medio de las montañas se erige nuestro próximo destino: Chur. Se trata de la ciudad más antigua de los Alpes, que destaca por tener un rico pasado histórico que podrás disfrutar visitando museos y paseando por su casco antiguo peatonal.
Después de esta visita por Chur, llegarás al Parque Nacional Suizo, en Engadina, que resulta ser el más antiguo de los Alpes. Allí podrás encontrar distintos animales en plena libertad a través de los recorridos del Parque.
El último punto de este recorrido es Saint Moritz, un glamuroso complejo de montaña, famoso por su gran lago y sus aguas medicinales, además de por ser sede de dos ediciones de los Juegos Olímpicos de Invierno.
Otras posibles paradas:
- Guarda
- Monasterio St. Johann
- Muottas Muragl
- Diavolezza
- Garganta de Tamina
St. Moritz – Lugano (221 kilómetros)
La fascinante naturaleza suiza sigue presente también en esta etapa, ya que tu primera parada será el Parc Ela, el mayor parque natural del país. A mayores, encontrarás pueblos con gran encanto e impresionantes castillos.
Prosiguiendo con la naturaleza, será imperdible que visites Ruinaulta, el gran cañón suizo que se encuentra ubicado en el Valle del Rin Anterior y que desborda encanto por todos sus rincones.
Otra parada importante será Ascona, ya que es la ciudad con la menor altura de Suiza, al estar situada a unos 196 metros sobre el nivel del mar. Su ambiente mediterráneo, el paseo junto al lago y su clima apacible no dejará indiferente a nadie.
Para finalizar esta etapa, llegarás a Lugano, una ciudad próxima a Italia y que es el tercer centro financiero de Suiza. Destaca por las estampas de la ciudad a orillas del lago homónimo, rodeada de paisajes naturales y una floración primaveral destacada en sus parques que la tiñe de color.
Otras posibles paradas:
- Fortaleza de Bellinzona
- Locarno
- Gandria
- Garganta de Viamala
- Splügen
Lugano – Zermatt (264 kilómetros)
Por su cercanía a Lugano y las vistas que ofrece de la ciudad, recomendamos como primer destino de esta penúltima etapa la subida al Monte Bré. En el romántico pueblo de Bré podrás visitar sus típicas tabernas y sentirte como en una antigua colonia agrícola.
En épocas veraniegas, aconsejamos la visita al valle Verzasca y el baño en sus aguas verdes, bien sea en el lago di Vogorno o en el río Verzasca.
Otro destino obligado será el Matterhorn, la montaña más fotografiada del mundo y todo un símbolo de Suiza. Destino de los montañistas más expertos, podrás observar un magnífico paisaje de la montaña desde el mirador Gornergrat, al que puedes llegar en ferrocarril de cremallera.
Acabarás el recorrido en Zermatt, una zona que ofrece todo tipo de actividades, tanto en invierno como en verano, desde excursiones en bicicleta hasta esquí o trekking.
Otras posibles paradas:
- Gruta de hielo del glaciar del Ródano
- Jungfrau-Aletsch
- Brissago
- Giornico
- Castillo Stockalper
Zermatt – Lausanne (178 kilómetros)
Tras dejar Zermatt atrás, la primera parada será Grimentz, un singular pueblo que destaca por su estrecha calle principal llena de casas de madera y adornadas con geranios rojos.
Además, es reconocido por sus bodegas del vino de glaciar, especialidad heredada de los antiguos campesinos nómadas.
El próximo lugar de visita es el castillo de Chillon, construido sobre una roca a orillas del lago Ginebra. Fue lugar de residencia de los condes de Saboya durante cuatro siglos y, hoy en día, es visitado por miles de turistas.
También a orillas del lago Ginebra se encuentra el Museo Olímpico, construido como reconocimiento a la historia e ideología olímpica.
La última parada de la Gran Ruta Suiza será Lausanne, una ciudad llena de vida por ser Capital Olímpica, contar con una importante universidad y ser una ciudad mercantil.
Otras posibles paradas:
- Abadía de Saint-Maurice
- Les Diablerets
- Lavaux
- Sion
- Parque Natural Pfyn-Finges
Como has podido observar, es una ruta muy extensa y a la que, insistimos, se le deben dedicar bastantes días y merece realizarse con la mayor tranquilidad posible.
Visitarás numerosos lugares clave y estamos seguros de que te acabarás por enamorar de Suiza a través de esta gran ruta en autocaravana. Pero, a mayores, existen otros muchos rincones en la geografía suiza que merecen ser descubiertos por ti.
Podrás conducir tranquilamente por las carreteras del país y disfrutar de unos excelentes campings con todos los servicios a disposición de tu autocaravana.
Y, ahora, solo te queda disfrutar de esta maravillosa ruta y contarnos tu experiencia en los comentarios. 👇 ¡A divertirse!
